El otro día llegó Elena toda emocionada de casa de sus padres: "Que ha gateado!!". Ya intentaba hacer sus pinitos pero se le resbalaban las patitas. Pero claro, en casa de los padres de Elena hay una hermosa alfombra y eso agarra mucho mejor.
Así que, para que la niña practique, tenemos que poner una alfombra nosotros también. Al día siguiente, excursión al IKEA y ya tenemos puesta una alfombra de 2x3 metros 100% lana natural bien gorda. Y efectivamente, la niña le ha pillado el gusto y en cuatro días se ha puesto a gatear en serio. Ya se le da bien hasta fuera de la alfombra. Ahora si la dejas en el salón y te vas al baño, de repente te la encuentras en la puerta. Los perritos están aterrorizados, porque ya no pueden escapar de ella (todo lo más, le sacan ventaja, pero ella es incansable). Ya teníamos una puerta de esas que se ponen en las escaleras, pero ahora vamos a tener que cubrirlas todas.
Si hay una prueba irrefutable de que mi casa ya no es mi casa, sino la casa de Sandra, es que nos hemos gastado 400€ en una alfombra que de otra manera no hubiesemos puesto en la vida, sólo para que pueda gatear. Eso sí, ¡qué bien que se va descalzo por el salón!
PD: Elena no me perdona que cuando le dije a mi madre que habíamos puesto una alfombra porque ya gatea, no lo dije con el entusiasmo que corresponde a la ocasión (cada vez que lo explica, me imita poniendo voz de modorro).
3 comentarios:
Sucedió así: Sandra empezó a gatear el lunes, el martes por la noche llama la madre de Jorge y después de media hora hablando le pregunto en lo bajini si le había dicho que gateaba. Me hace un gesto como de que espere y suelta (con voz de interesante): "pues sabes, hemos comprado una alfombra porque resulta que la peque si tiene alfombre gatea" (con una falta total de emocion al contarlo)
Yo me subía por las paredes, esas no son formas, a que no? Es igual que si contara que se ha comprado un coche, y no es lo mismo. Esto es muy emocionante.
La tenéis que ver, es super graciosa, aunque empezó muy bien pero ahora ya va con una pierna medio levantada, no es muy ortodoxa.
400 euros???? una alfombra????
Sandrita está logrando lo imposible!!!!
Bueno Elena, no seas modorra y deja que nos metamso un poco contigo...
Me gustan las actualizaciones del blog, gordo insensible ;)
Besos para todos y feliz año
Pues sí, y no me salieron del alma como se podría pensar (a quien no lo sepa soy un poco tacañota)
Y todo para que gatee. Si es que por un hijo haces lo que sea... De todas formas es una gozada estar en la alfombra ahora, antes cuando me ponía en el suelo me quedaba fría enseguida, ahora estamos mucho tiempo ahí tumbados con ella.
Publicar un comentario