viernes, 18 de diciembre de 2009

La leyenda del niño que siempre duerme

Cuenta la leyenda que existe un niño que se pasa el día durmiendo. Que sólo se despierta de vez en cuando, muy levemente, lo justo para tomar la teta. Dicen que como consecuencia tiene unos mofletes que parecen globos. Pero de los que tienen cesta y llevan gente. Y que no llora nada, que no sabe.
Aseguran que se llama Sergio.

Como todas las leyendas, tiene una parte de historia real. El niño existe, y es verdad que se pasa el día comiendo y durmiendo. Pero con una salvedad. Sólo cuando lo ve la gente. Cuando está en casa solo con sus papás, el niño demuestra que es capaz de berrear de manera muy respetable. Y dormir, a ratos. Normalmente teta un poco, se empieza a quejar, se pone nervioso y no sabe volverla a coger. Y cuando ya se ha cansado, está nervioso y no se sabe dormir y se queja aún más. Sobre todo al anochecer, cuando sus papis se echan a la cama.

Bueno, antes de que salte al rescate su mamá, lo reconozco... no es para tanto. La verdad es que es muy buenecico. Y lo de los problemas a la hora de coger la teta creemos que es por problemas de tripita. Pero llorar, sabe. Aunque es vago el tío. Empieza respirando fuerte, cada vez más deprisa. Como una locomotora de vapor arrancando. Luego se empieza a quejar. Va subiendo el tono. Y si aún no has llegado y lo has cogido entonces ya llora. Pero sólo si es estrictamente necesario.

Lo de la leyenda del niño que no llora creo que se repite en todas las familias. Cuando conoces a un niño que lo ves tranquilazo, dormilón y mofletudo, la típica observación "Qué niño más bueno" siempre suele ser contestada con un "No lo has visto en casa".

Y es que donde hay confianza...

1 comentario:

Pili dijo...

Pues sera en casa, pero yo como tia de la criatura doy fe que habre visto los ojos del niño unas cinco veces como mucho desde que nacio, y las veces que lo he visto despierto no ha sido para llorar, asi que la leyenda tiene mucho de cierto.